domingo, 4 de enero de 2009

Pesadilla de año nuevo

Pesadilla de nuevo en año nuevo, levantarme de la cama y verme al espejo, 
con cara la desgastada por el calor incesante, 
con el frio en mis manos por el retorno de mi alma a este cuerpo,
luego de sentirme atacado y abatido en el desierto.

Anhelo en esta dimensión encontrar porfín algo nuevo,
sentirme de nuevo feliz y pleno;
pero veo que no hay nada nuevo, no hay nada nuevo.
Por mas afirmaciones, por más plegarias, por más anhelos, 
nada resulta, nada cambia,
como si las palabras y rezos generaran resultado adverso, como cual infalible mago negro.
Intentaré entonces el silencio, intentaré la soledad, 
en campo lejano y espeso.

Pobreza, hambrunas e indiferencia, ante mis ojos encuentro.
violencia, torturas, abandono y desconsuelo,
mis oidos y nariz perciben aromas y gritos de duelo.
pan de cada día, veneno de todas las noches, mi boca siente hastío y rabia por dentro.
terminando anhelar armonia y paz, con hambre de amor y deseo.

Hasta cuando cielo, hasta cuando padre, hasta cuando madre, hasta cuando?;
hasta cuando mis ojos se veran con esperanza y alegría en el espejo?,
hasta cuando mi mente y mi corazon dejaran de luchar para estar en algo de acuerdo?
hasta cuando padre, tendras piedad de mi y me daras una mano de consuelo?
Dicen que soy tu imagen y semejanza, acaso sufres?, acaso lloras?, como yo siento?
sientes indiferencia?, te has sentido perdido?,  te has sentido enfermo?.
sientes pasión desenfrenada y ganas de entregarlo todo por un te amo o un te quiero?

Desahogo mi tristeza y vacío en estas palabras, despues de noches de sueños tensos,
porque he encontrado consuelo, más no un te amo o un te quiero,
de la persona con la que siempre sueño, la persona que por error abandoné sin miramientos.
No te cuestiono, no estoy en contra de tus preceptos;
no me siento pecador, ni creo en el infierno, creo en la luz y en el paraíso eterno;
si me amas, ven pronto a mi, cual lluvia en árido desierto.

Te pido siempre por ella, te pido que hagas realidad sus sueños,
aunque sea bajo otros brazos y sienta otros labios, otros besos,
quiero que sea feliz, que vea la luz y la libres de todo lamento.

De nada sirve revolcarme en mis lamentos, ni arrepentirme de lo hecho,
solo quiero nacer de nuevo bajo este mismo cuerpo,
comenzar un nuevo camino, alcanzar un mundo de amor puro y eterno.
Creo en la verdad, pero cuando caerá el velo?